Habia una gran brecha espacio-temporal entre ese día en Valencia y la noche de ayer en Barcelona. La había, os doy mi palabra. Nadie parecia unir ese niño lleno de sueños con aquel joven vacio de más ambiciones que seguir como está.
Este niño soñaba con Barcelona. Soñaba con esa ciudad, con fundirse entre sus barrios góticos, los arcos de Gaudí y la cultura catalana, con sus gentes e incluso su poesía. Más tarde, en un aula, pensaba (casi cerrando los ojos) con un grupo que creía sito en Madrid, sobre oncogenómica. Leucemia, se decía...tampoco le acababa el tema,pero estar en ese proyecto parecía un espejismo inalcanzable.
Y, sobre su cama, cual tabla de naufrago, escribia poesias, zambullendose de vez en cuando en si mismo, hasta quedar mojado por el mar (y por sus lágrimas), esperando poder compartir su vida con quien quisiera. Como Becquer y Wilde escribieron.
Ese niño, hoy era un joven ya de 24 años. Y levantando la cabeza hacia las faroles de Passeig de Gràcia, pensaba en todo lo que tenía que hacer el lunes para el grupo de Elias Campo, especialistas en oncogenómica de canceres linfáticos. Al dia siguiente no iría al laboratorio: esperaba salir de viaje hacia Zaragoza, para reunirse con aquello que nunca ha tenido que echar de menos: sus amigos. No estaba sólo.
Bajó la cabeza y, sonriendo, dijo: "De verdad, que cuando estemos mal, estemos como ahora".
No es un cumpleaños más. Es un feliz, feliz cumpleaños. Que empezó con estas imagenes. ¡Gracias por el regalo! ^^
Por si no lo veis bien...aquí está:
http://www.airedebarcelona.com/galeria.html
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Tinc ganes d'estimar-te
http://www.youtube.com/watch?v=6TCVyW4mWio
