C'est fini...tout fini

Y ya está. Esta es la noticia.

En unas horas estaré gozando de la compañía de mi familia, de mis amigos. Lejos de un país que habla un idioma ininteligible (no por no entenderlo...sino por no comprenderlo). Tan lejos...y tan cerca.

¿Deberia cerrar este blog? A fin de cuentas, me encontraba en mitad de ninguna parte. Ya ha cumplido su misión.

O quizás aun no. ¿O me podríais decir si no echaré de menos esta tranquilidad, estas fiestas...esta gente, incluso? Definetely, lo haré. En una semana estará extrañandome todo esto, no tener a la gente, no volverlos a ver...nunca más. Y no es un Eramus normal, ha sido una prisión, una convivencia forzosa, un momento duro compartido. Ha sido, Cranfield.

Son las 7:12 aqui (8:12 en Valencia). Hoy no dormiré ni dos horas. Quizás mañana. Mientras...me toca reflexionar.

En nada subiré fotos. Aunque no esté en Cranfield, sigo irremediablemente en el, dulcemente doloroso. Horriblemente agradable. Si es cierto que tanto influido...quizás, siempre esté perdido, aislado, olvidado. In the middle of nowhere